El Gobierno de Bolivia manifestó su profunda consternación ante el atentado ocurrido en Australia, que dejó un saldo de 16 personas fallecidas y al menos 40 heridas. En un comunicado oficial, las autoridades bolivianas expresaron su rechazo absoluto al terrorismo y a cualquier manifestación de odio.
La Cancillería del país sudamericano, en representación del presidente Rodrigo Paz, condenó enérgicamente el ataque perpetrado en Bondi Beach, Sídney, durante una celebración pacífica y comunitaria que reunió a cerca de mil personas para conmemorar la festividad judía de Janucá. El incidente, ocurrido alrededor de las 18:40 hora local, involucró a dos hombres armados que abrieron fuego contra la multitud en un parque cercano a la emblemática playa.
El Gobierno boliviano lamentó profundamente los hechos de violencia, rechazando categóricamente el uso de la violencia como medio para expresar posturas políticas, ideológicas o religiosas. Asimismo, transmitió sus condolencias al pueblo australiano, al Gobierno de Australia y expresó solidaridad con las familias de las víctimas y la comunidad judía afectada.
El comunicado reafirma el compromiso del Estado boliviano con la paz, el respeto a la vida y los derechos humanos, haciendo un llamado a la comunidad internacional para actuar con determinación y evitar que tragedias de esta naturaleza se repitan en el futuro.
Por su parte, las autoridades australianas confirmaron que los presuntos responsables del ataque son un hombre de 50 años, quien murió tras enfrentarse con la policía, y su hijo de 24 años, que permanece hospitalizado bajo custodia. La policía indicó que no hay más sospechosos involucrados y que el agresor fallecido tenía licencia para portar armas desde hace una década, con al menos seis armas registradas a su nombre
