Fuerzas de seguridad bolivianas han iniciado labores de despeje en la antigua carretera que conecta Cochabamba con Santa Cruz y Sucre, donde aún se registran obstáculos a pesar de un anuncio previo de cese de medidas.

El personal policial se encuentra retirando acumulaciones de tierra y piedras dejadas en la vía por quienes ocuparon los puntos de bloqueo, y que se retiraron sin liberar completamente el tránsito.

Las operaciones de remoción se centran actualmente en los tramos intermedios de la ruta. No obstante, se confirma que los municipios de Tolata, Cliza, Arani y Punata ya se encuentran totalmente habilitados para la circulación vehicular.

Para abordar los impedimentos de mayor tamaño, se ha dispuesto el uso de maquinaria pesada con el fin de agilizar la rehabilitación del paso hacia las regiones oriental y sur del país.

En cuanto a otras vías troncales, las rutas que enlazan las ciudades de La Paz, Oruro y Potosí operan con normalidad y están completamente transitables

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