El Ministerio de Medio Ambiente y Agua, en colaboración con los productores agrícolas de San Jacinto, está diseñando un plan de financiamiento destinado a modernizar la infraestructura de riego en esta importante zona productiva. La iniciativa responde a la necesidad de reemplazar la tubería principal del sistema de riego, cuya antigüedad y deterioro han comenzado a afectar la eficiencia en la distribución del recurso hídrico.
Se ha confirmado que el Ministerio de Medio Ambiente y Agua, en colaboración con los productores agrícolas de San Jacinto, está diseñando un plan de financiamiento para abordar esta problemática. Las conversaciones entre las autoridades ministeriales y los representantes de los regantes han avanzado significativamente, enfocándose en la estructuración de un esquema financiero viable para la ejecución del proyecto.
Según declaraciones recientes de un representante ministerial, se ha solicitado una revisión del estudio técnico inicial. Esta actualización podría resultar en un incremento del presupuesto original, estimado en 600 millones de bolivianos, debido a la decisión de no solo reemplazar la infraestructura existente, sino también de ampliar su capacidad. Esta ampliación responde a la necesidad de optimizar el sistema y asegurar un suministro adecuado para toda el área de influencia.
El proyecto ha sido elevado a instancias superiores del gobierno para su consideración y aprobación. Se espera que, tras la coordinación interinstitucional necesaria, se pueda dar inicio formal a las obras. La relevancia de esta intervención ha sido destacada por las autoridades, quienes la consideran fundamental para el desarrollo productivo de la región, especialmente para el sector vitivinícola, predominante en el área de San Jacinto.
Los agricultores locales han expresado la urgencia de este proyecto, señalando que la tubería actual, instalada desde la inauguración del sistema de riego en 1989, ha superado su vida útil y presenta numerosas deficiencias. El sistema actual experimenta frecuentes averías y fugas, especialmente cuando se incrementa la presión del agua para cubrir las necesidades de riego en toda la zona. Estas deficiencias resultan en pérdidas significativas de agua y dificultan el acceso equitativo al recurso para todos los productores, afectando negativamente la productividad agrícola.
La modernización del sistema de riego en San Jacinto se presenta como una inversión estratégica para garantizar la sostenibilidad y el crecimiento del sector agrícola en la región, consolidando a esta zona como un polo productivo clave en el departamento