El municipio de Entre Ríos ha declarado formalmente desastre natural debido a las severas consecuencias provocadas por el reciente desbordamiento del río Pilcomayo y los deslizamientos de tierra que han afectado extensas áreas de su jurisdicción. La decisión fue ratificada durante una sesión del Concejo Municipal llevada a cabo el jueves, tras la recepción y análisis de un informe técnico detallado sobre los daños ocasionados por los recientes eventos climáticos adversos.

Según información confirmada por fuentes del Concejo Municipal, el informe técnico, que fue minuciosamente evaluado, sirvió de base para la aprobación unánime de la declaratoria de desastre. Se ha solicitado al ejecutivo municipal información complementaria específica para consolidar un expediente completo que será remitido a las autoridades departamentales y nacionales. El objetivo es informar exhaustivamente al Gobierno Autónomo Departamental de Tarija, al Ministerio de Medio Ambiente y al Viceministerio de Defensa Civil sobre la magnitud de la crisis.

Los datos preliminares indican que aproximadamente el 70% de las comunidades dentro del municipio han sufrido las consecuencias de esta emergencia, afectando a más de 500 familias. Si bien las pérdidas en cultivos no se consideran significativas, dado que la zona inundable del río Pilcomayo no es un área de extensa producción agrícola, los daños a la infraestructura son considerables.

La infraestructura más afectada incluye los sistemas de agua potable y la red vial. Se reportan daños en 27 sistemas de agua potable que abastecen a 27 comunidades, con afectaciones en las tomas de agua y roturas de tuberías y depósitos causadas por deslizamientos. La red caminera municipal también ha sufrido graves daños, con 193 kilómetros de vías de ripio deterioradas por deslizamientos y derrumbes. Adicionalmente, se han reportado daños significativos en carreteras de competencia departamental, aunque la evaluación precisa de estas afectaciones aún está pendiente por parte de las autoridades correspondientes. Se estima que la red vial departamental en la provincia O’Connor, que comprende alrededor de 500 kilómetros, ha sido impactada de manera importante.

Las zonas más afectadas incluyen Puerto Margarita, Yuhati y Zapaterambia en el cantón Chimeo, y diversas comunidades en el cantón Chiquiaca como Vallecito Los Lapachos, Chiquiaca Norte, Centro y Sud, Loma Alta y Pampa Redonda. También se reportan daños en los cantones La Cueva y Salinas, evidenciando una afectación generalizada en toda la jurisdicción municipal.

La situación se atribuye principalmente a un periodo inusualmente prolongado de lluvias que se inició a principios de octubre y que ha provocado un deterioro generalizado en la región.

En cuanto a la asistencia a los damnificados, el gobierno municipal ha proporcionado ayuda primaria, principalmente en forma de alimentos. No obstante, se reconoce que los recursos municipales destinados a la atención de desastres naturales, que ascienden a 90 mil bolivianos, son insuficientes para cubrir las necesidades. Por ello, se ha hecho un llamado a instancias superiores, como la gobernación departamental y el Viceministerio de Defensa Civil, para que se brinde apoyo adicional. Existe la expectativa de que una parte de un crédito de 75 millones de dólares recientemente aprobado a nivel nacional para la atención de familias damnificadas pueda destinarse al municipio de Entre Ríos, especialmente para asistir a las comunidades del pueblo guaraní que se encuentran entre las más afectadas.

La normativa de declaratoria de desastre ha sido remitida al ejecutivo municipal para su promulgación y se espera que en breve sea enviada a las instancias departamentales y nacionales junto con toda la documentación pertinente