El campo de juego de Montero fue testigo del esperado retorno de Nahuel Acosta a la disciplina de Blooming, marcando su primera aparición oficial en el transcurso de medio año. El delantero uruguayo ingresó al terreno de juego en el minuto 83 del compromiso frente a Always Ready, sustituyendo a Franco Posse, en un momento en que el marcador reflejaba un empate a un gol. A pesar de su evidente dinamismo y disposición, su contribución no fue suficiente para alterar el desenlace del encuentro, que culminó con una derrota de 2-1 para el conjunto celeste.

La afición celebró con entusiasmo la reaparición del atacante, cuya vuelta a la acción fue recibida con ovaciones tras un prolongado periodo de ausencia e incertidumbre respecto a su recuperación. Su regreso a la cancha le permitió reconectar con el fervor de los seguidores.

La última vez que Acosta había vestido la camiseta de Blooming en un partido oficial fue el 9 de mayo, durante una victoria por 3-1 contra Wilstermann, también disputada en Montero. Aquella jornada, el jugador sufrió un desgarro en el abductor derecho, una lesión de considerable gravedad que estuvo cerca de requerir una intervención quirúrgica y lo mantuvo alejado de la competición por casi seis meses.

El proceso de rehabilitación del futbolista implicó múltiples traslados a Montevideo, donde recibió atención especializada por parte del personal médico del club que posee sus derechos deportivos. No obstante, fue el equipo médico de Blooming el que finalmente logró completar su puesta a punto, permitiéndole reincorporarse a los entrenamientos con el resto del plantel.

La reincorporación de Acosta ofrece al director técnico Mauricio Soria una alternativa ofensiva adicional de cara a la fase final de la temporada. En caso de que el delantero uruguayo logre alcanzar su máximo potencial físico y futbolístico, podría convertirse en un elemento crucial para un Blooming que busca revertir una reciente tendencia de bajo rendimiento colectivo e individual