Una representante legislativa por Potosí ha instado a que los recientes episodios de violencia en Llallagua no queden sin sanción, al tiempo que ha cuestionado las declaraciones emitidas por ciertos parlamentarios. La legisladora, Lissa Claros, ha enfatizado la necesidad de esclarecer los hechos y sancionar a los responsables, rechazando categóricamente las posturas de figuras como Leonardo Loza, Renán Cabezas y Vilma Alanoca, a quienes calificó de infundadas y ajenas a la dramática situación vivida.

Claros detalló que los sucesos incluyeron la quema de propiedades y ataques directos contra la integridad física de los ciudadanos de Llallagua. Sostuvo que la población local actuó en legítima defensa frente a la agresión de grupos armados que atentaban contra la seguridad civil. La diputada calificó lo ocurrido como graves violaciones a los derechos humanos, producto de un asedio que se extendió por más de nueve días, durante el cual se interrumpió el suministro de alimentos básicos y se sabotearon las redes de agua potable mediante la detonación de explosivos en las cañerías.

La legisladora reiteró su firme convicción de que estos actos no pueden quedar impunes y criticó a aquellos parlamentarios que emiten juicios sin haber estado presentes en el lugar de los hechos. En ese sentido, los instó a presentar pruebas que respalden sus alegaciones sobre la supuesta presencia de funcionarios públicos.

Asimismo, Claros informó que, hasta el momento, varios ciudadanos afectados permanecen en estado crítico de salud, y denunció que algunos fueron objeto de tortura y secuestro por parte de los grupos agresores. Subrayó que ninguna justificación de índole política puede validar la magnitud de lo sucedido en el municipio. Finalmente, anunció que se iniciarán acciones legales contundentes y se buscará el respaldo de instancias internacionales para garantizar que se haga justicia