Tras el empate 2-2 de Boca Juniors frente al Benfica portugués en su debut en el Mundial de Clubes, el mediocampista Rodrigo Battaglia expresó su desazón por el resultado, indicando que el equipo se marchó con una sensación de oportunidad perdida. Consideraba que la victoria estaba al alcance de la mano.

Battaglia, autor del segundo tanto para el conjunto argentino, manifestó su frustración por no haber conseguido sacar provecho de la superioridad numérica. Esta situación se presentó tras la expulsión del delantero italiano del Benfica, Andrea Belotti, en un momento en que Boca se encontraba en ventaja por 2-1.

El jugador también analizó cómo el rival logró igualar el marcador, señalando que ambos goles del Benfica provinieron de jugadas a balón parado. Mencionó específicamente el cabezazo de Nicolás Otamendi a seis minutos del final, originado en un tiro de esquina, y el penal convertido por Ángel di María antes de concluir la primera mitad, sancionado tras una falta también derivada de un saque de esquina.

A pesar del lamento por el desenlace, el centrocampista destacó el compromiso y la entrega de sus compañeros en el campo. Afirmó que el equipo dejó todo, compitió con intensidad, mostró esfuerzo físico y ejecutó la estrategia prevista.

Mirando hacia adelante, el exjugador de clubes como Mallorca, Braga y Sporting Lisboa, instó a concentrarse en los próximos compromisos del torneo y a mantener el nivel competitivo. Asimismo, quiso resaltar el apoyo brindado por la afición xeneize que se hizo presente en el Hard Rock Stadium de Miami para el encuentro.

Con este empate, Boca Juniors se sitúa en la segunda posición del Grupo C del Mundial de Clubes con un punto. El líder del grupo es el Bayern Múnich alemán, que suma tres unidades tras golear 10-0 al Auckland City neozelandés en su partido del domingo