La Cooperativa de Servicios de Agua y Alcantarillado de Tarija (Cosaalt) atraviesa un momento de crisis institucional marcado por presuntas irregularidades y disputas internas, lo que ha generado un fuerte clamor entre los socios por la convocatoria a una asamblea general. Se ha confirmado que se han presentado al menos tres solicitudes formales al Consejo de Administración instando a la realización de este encuentro.
La demanda de los socios responde a la necesidad de obtener información clara y detallada sobre la situación actual de la cooperativa, especialmente en lo referente a su estado financiero. Representantes del Consejo de Vigilancia han señalado que la asamblea general se encuentra pendiente desde el año 2023, y hasta la fecha no se han presentado los informes económicos correspondientes a las últimas dos gestiones, incumpliendo lo establecido en el estatuto de la entidad.
Ante esta situación, el Consejo de Vigilancia ha ejercido presión sobre el Consejo de Administración. Si bien se había asumido el compromiso de convocar la asamblea para el mes de julio, se ha establecido un plazo perentorio hasta el próximo viernes. De no concretarse la convocatoria por parte del Consejo de Administración en ese periodo, el Consejo de Vigilancia procederá a emitirla directamente, respetando el plazo estatutario de 15 días de anticipación. Las disputas internas han sido identificadas como un factor determinante en el retraso de esta asamblea, que originalmente debió realizarse en 2024.
La agenda propuesta para la asamblea general incluye puntos clave como el informe financiero de la gestión 2023, así como los informes de gestión tanto del Consejo de Vigilancia como del Consejo de Administración. Adicionalmente, se contempla un espacio para tratar temas diversos de gran relevancia, entre los que se destacan la posible revisión de los estatutos de la cooperativa, la presentación de resultados de auditorías (si las hubiere) y las acciones legales que se hayan emprendido contra la gerencia.
La situación de conflicto interno en Cosaalt no solo afecta la transparencia y la gobernanza, sino que también está teniendo consecuencias directas en la ejecución de proyectos esenciales para la comunidad. La dirigencia de la Federación Departamental de Juntas Vecinales de Tarija (Fedjuve) ha manifestado su preocupación, indicando que las disputas están paralizando la ejecución de convenios tripartitos orientados a proyectos de ampliación de redes de agua potable y alcantarillado. Estos proyectos forman parte del Plan Operativo Anual y deberían estar en marcha este año con la concurrencia del Gobierno Municipal, el Gobierno Nacional y la propia cooperativa.
Existen barrios que ya disponen de materiales provistos por el municipio para iniciar obras, pero su ejecución permanece incierta debido a la inestabilidad institucional. La Fedjuve ha solicitado que la asamblea aborde específicamente el estado de estos proyectos para clarificar su futuro.
Otro proyecto afectado es la limpieza de las lagunas en el barrio San Luis, que cuenta con presupuesto asignado pero depende de la obtención de una licencia ambiental. Representantes del Consejo de Vigilancia han señalado que la tramitación de esta licencia ante la dirección de medio ambiente de la gobernación enfrenta obstáculos y requisitos que dificultan su aprobación, generando demoras. Se considera que las disputas internas contribuyen a esta falta de diligencia y a la dificultad para cumplir con el POA. Se ha hecho un llamado a restablecer el orden institucional y aplicar un principio de autoridad que asegure el avance de las tareas planificadas.
Ante las continuas denuncias de supuesta mala gestión y posibles irregularidades, la dirigencia vecinal, incluyendo a ex consejeros de administración, ha planteado la necesidad de realizar una auditoría interna. Esta medida se considera fundamental para garantizar la transparencia en la administración y las finanzas de la cooperativa y disipar las dudas existentes
