En el cierre de la duodécima jornada del Campeonato, Totora Real Oruro capitalizó la compleja situación deportiva e institucional de Wilstermann, logrando una contundente victoria de 3-1. El encuentro, disputado en el estadio Jesús Bermúdez, evidenció una notoria disparidad en el rendimiento de ambos equipos, marcando la segunda victoria del conjunto orureño en su feudo.

La estrategia del equipo local, bajo la dirección técnica del argentino Marcelo Straccia, se distinguió por la efectividad de sus disparos desde media y larga distancia, una táctica que continúa consolidando un estilo de juego cohesivo entre sus futbolistas. Este triunfo inyecta un considerable optimismo en las filas del representante orureño, que busca reencauzar su trayectoria en la competición. Con once unidades y ubicado en la duodécima posición, el club aspira a una participación decorosa en su temporada debut dentro del fútbol profesional.

El marcador se abrió tempranamente, a los nueve minutos, gracias a un potente zurdazo de Sebastián Zeballos desde unos treinta metros, que dejó sin opciones a la defensa visitante. El elenco foráneo, mermado por limitaciones en su plantilla y con un cuerpo técnico en fase de adaptación, encontró dificultades para reaccionar ante la desventaja inicial. La ventaja se amplió a los 36 minutos, cuando Luis Alí, tras recibir un preciso centro de Yerco Vallejos, ejecutó un derechazo imparable que superó la resistencia del guardameta Lucas Salinas. Este segundo tanto pareció sellar el destino del encuentro, evidenciando la falta de espíritu competitivo en el conjunto aviador.

Al inicio de la segunda mitad, a los 46 minutos, Gustavo Ribeiro añadió un gol más a la cuenta local con un certero derechazo raso desde fuera del área, consolidando la superioridad. A pesar de que el equipo anfitrión concluyó el partido con diez jugadores debido a la expulsión de Raúl Gómez a los 56 minutos, el dominio del juego se mantuvo inalterable.

El descuento para la visita llegó a los 73 minutos, obra de Leo Andersen, quien conectó de cabeza un envío de Alejandro Chumacero. Poco después, un disparo de Edwin Tumiri que impactó en el poste izquierdo representó la última ocasión de peligro real para los visitantes, quienes no lograron alterar el marcador final

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