En el momento más apremiante para Alianza Lima, la figura de Guillermo Viscarra emergió con una trascendencia innegable. El guardameta boliviano se erigió en el protagonista indiscutible de una noche memorable en suelo brasileño, cuya actuación resultó crucial para que la escuadra peruana superara a Gremio y accediera a los octavos de final de la Copa Sudamericana, en un pulso cargado de dramatismo y tensión.

La jornada en el Arena do Gremio, en Porto Alegre, representó un desafío mayúsculo para los visitantes. Tras haber obtenido una ventaja de 2-0 en el encuentro de ida, Alianza llegaba con un margen favorable, consciente de que se enfrentaba a uno de los colosos del continente. El conjunto local intensificó su ofensiva desde el inicio de la segunda mitad, ejerciendo una presión incesante en busca de la remontada.

El gol de Gustavo Martins a los 56 minutos reavivó las esperanzas de los aficionados tricolores. A partir de ese instante, Gremio arrinconó al equipo rival y cada embate amenazaba con el segundo tanto, el cual habría llevado la definición a la tanda de penales. Sin embargo, en el arco se mantenía infranqueable Viscarra.

El minuto 82 marcó el momento culminante del encuentro. Tras una elaborada combinación ofensiva, el delantero danés Martín Braithwaite quedó mano a mano con Viscarra y ejecutó un disparo contundente. El guardameta boliviano reaccionó con una agilidad felina, logrando desviar el balón con una intervención providencial que frustró la celebración en todo Porto Alegre.

Su destacada labor no se limitó a ese instante decisivo. A lo largo del partido, Viscarra realizó al menos tres paradas de mérito, demostrando una seguridad envidiable. Su desempeño fue tan notable que la entidad continental no dudó en resaltarlo públicamente, mediante la difusión de material audiovisual que lo destacó como héroe y, posteriormente, con otro video que lo calificaba como la muralla de Alianza Lima, exhibiendo sus mejores intervenciones.

El colofón llegó minutos después, cuando Hernán Barcos anotó el 1-1 definitivo en el minuto 96, sellando el pase de Alianza Lima con una ejecución impecable. Si bien el gol del atacante argentino fue fundamental, la resistencia del equipo se cimentó en las intervenciones salvadoras de Billy Viscarra, quien mantuvo a su escuadra en pie cuando más lo necesitaba.

Con esta actuación, el guardameta de la selección boliviana no solo consolida su posición como referente en su club, sino que también evidencia un pico de forma en su carrera. La Copa Sudamericana ha descubierto un nuevo protagonista, y este es de origen boliviano