El presidente de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, Alan Barca, ha anunciado que el proyecto de Ley de Emergencia Financiera, propuesto por el gobernador, ha sido enviado a la comisión de Hacienda y Finanzas para su evaluación. Esta decisión se tomó después de que el proyecto no lograra el respaldo necesario para ser discutido de inmediato en la sesión del pasado viernes.
Barca explicó que, debido a la falta de mayoría en la votación, el procedimiento establecido por la normativa departamental requiere que el proyecto sea primero revisado por las comisiones correspondientes. En su intervención, destacó que su función es facilitar el debate sobre los temas en cuestión, independientemente de su capacidad de voto en este contexto.
El presidente de la Asamblea también expresó su preocupación ante las protestas de diversos sectores, señalando que aún no se ha tratado el proyecto en el legislativo. Subrayó la necesidad de realizar ajustes en el gasto de las instituciones sin caer en demagogia y enfatizando la importancia de manejar programas sensibles.
Por otro lado, la asambleísta Zaida Laura, miembro de la comisión de Constitución, criticó que el proyecto solo se enviara a la comisión de Hacienda, argumentando que también debería ser analizado en otras comisiones, como la de Constitución. Laura denunció que existe manipulación por parte de la presidencia de la Asamblea y mencionó que, a pesar de haber solicitado la documentación pertinente, aún no la ha recibido.
En relación a este asunto, el gobernador Óscar Montes comentó que se espera un tiempo razonable para que el proyecto de Ley de Emergencia Financiera sea debatido. Reiteró que no hay recursos económicos suficientes para seguir financiando leyes aprobadas en administraciones anteriores, como la del exgobernador Lino Condori.
Montes lamentó la oposición del Movimiento al Socialismo (MAS) al cambio de modelo que busca implementar la gobernación para adaptarse a la realidad económica actual, acusándolos de boicotear los esfuerzos por mejorar las finanzas institucionales.
Finalmente, el gobernador advirtió que, si el proyecto no se aprueba, solicitará su retiro y comenzará un proceso de cierre gradual de la gobernación a partir de mayo, manteniendo solo un número mínimo de empleados para el mantenimiento de las vías. Montes cuestionó la eficacia de la Asamblea, sugiriendo que si los asambleístas no están dispuestos a aprobar leyes, podría ser más sensato cerrar la Asamblea antes que la gobernación