Frente a la confirmación reciente de una recesión económica en Bolivia, el poder legislativo ha promulgado una medida crucial destinada a aliviar la presión financiera sobre miles de ciudadanos. La Ley 547, aprobada esta semana, introduce una serie de disposiciones de carácter temporal para proteger a segmentos vulnerables de la población.
Esta legislación establece una moratoria temporal sobre los embargos y la ejecución de sentencias relacionadas con préstamos de vivienda social. Adicionalmente, la normativa contempla un aplazamiento en el pago de créditos hipotecarios para viviendas de interés social, así como para los financiamientos otorgados a micro y pequeñas empresas, sectores particularmente vulnerables en el actual escenario económico.
La promulgación de esta ley, tras un proceso de aprobación en sus distintas etapas legislativas, refleja un consenso dentro del parlamento sobre la urgencia de su implementación. Representantes del cuerpo legislativo destacaron la disposición y la madurez política demostradas para priorizar el tratamiento de esta iniciativa. Se enfatizó que esta medida responde a una necesidad imperante de los prestatarios, quienes han manifestado su inquietud ante la incertidumbre económica. La expectativa ahora se centra en el Órgano Ejecutivo, al que se ha remitido la ley para su correspondiente promulgación y una ágil reglamentación, con el fin de que sus beneficios puedan materializarse sin dilaciones