La dirigente de la organización política PAN-BOL, Ruth Nina, ha manifestado su firme disposición a comparecer ante cualquier citación judicial o notificación que le sea emitida.

Esta postura se enmarca en el desarrollo de una investigación en su contra, cuyo proceso judicial ha experimentado un cambio de jurisdicción. Inicialmente, el juzgado de Cochabamba se declaró incompetente para conocer la causa, lo que resultó en la remisión del expediente al juzgado de Shinahota.

Frente a esta situación, la líder política, en coordinación con su equipo legal, ha solicitado formalmente, a través de un memorial, que se emita una nueva notificación para su declaración. Adicionalmente, se ha requerido que la totalidad de los antecedentes y el cuaderno de investigación sean trasladados al juzgado competente en Shinahota. Al intentar presentar este documento, la señora Nina encontró las oficinas judiciales cerradas, impidiendo la entrega inmediata del memorial.

La investigación que pesa sobre Ruth Nina se origina en afirmaciones que realizó durante un ampliado de organizaciones sociales. En dicho evento, los participantes expresaron su respaldo al expresidente Evo Morales y demandaron su habilitación como candidato a la presidencia del país.

Las declaraciones de la dirigente han generado una considerable controversia, provocando fuertes críticas y la interposición de acciones legales en su contra. Entre las expresiones que se le atribuyen, se encuentra la advertencia de que la elección programada para el 17 de agosto no podría llevarse a cabo sin la participación de los sectores populares, las naciones indígenas y el candidato Evo Morales. Además, Nina habría señalado que, de no permitirse la participación de su candidato y de obligarse a las comunidades indígenas a votar por otras opciones, los ciudadanos optarían por la resistencia extrema antes que aceptar dicha imposición, sugiriendo que las autoridades, en lugar de contabilizar votos, se verían obligadas a contar víctimas fatales