Oriente Petrolero consiguió una victoria por 2-0 sobre Wilstermann en Montero, en un encuentro correspondiente a la décima jornada de la Liga. Este resultado permite al conjunto local prolongar su racha sin derrotas a cuatro partidos consecutivos y consolidar su ascenso en la tabla de posiciones del campeonato.
Tras el partido, Gualberto Mojica, director técnico de Oriente Petrolero, destacó la importancia de sumar los tres puntos, independientemente del marcador final. Si bien admitió que siempre se aspira a una diferencia de goles mayor, manifestó tranquilidad por el control que su equipo logró ejercer durante el desarrollo del juego, a pesar de reconocer que hubo momentos donde el funcionamiento colectivo no fue el ideal.
El estratega analizó el inicio del compromiso, señalando que los primeros quince minutos mostraron un buen arranque por parte de su plantel. Sin embargo, observó que posteriormente el equipo experimentó dificultades, perdiendo orden y claridad en su juego, lo que complicó la situación sobre el campo.
No obstante, Mojica valoró positivamente la reacción del equipo en la segunda mitad. Indicó que en el complemento encontraron una mayor precisión y lograron recuperar el nivel de juego y la cohesión táctica que exhibían antes del receso. Esta mejoría en la ejecución les generó una sensación más positiva sobre el rendimiento general. Aunque considera que aún hay aspectos por perfeccionar, el técnico se mostró optimista respecto a la dirección que está tomando el equipo.
Con esta secuencia de resultados favorables, Oriente Petrolero se perfila como uno de los equipos con mayor regularidad en esta fase del torneo. Mojica expresó su confianza en que, mediante el trabajo continuo, el grupo podrá mantener el nivel actual y seguir acumulando resultados positivos en las fechas restantes de la competición