Una reciente sesión del comité impulsor del proyecto hidroeléctrico El Carrizal evidenció nuevamente las tensiones existentes en torno a su desarrollo. Durante la reunión de este martes, el arquitecto Leopoldo López, integrante de dicha instancia, sostuvo un enérgico intercambio de palabras con el ministro de Medio Ambiente y Agua, Álvaro Ruiz, manifestando su descontento por la falta de avances tangibles en la gestión de la iniciativa.

López, visiblemente molesto, cuestionó la ausencia de resultados concretos, instando al ministro a adoptar una postura más resolutiva y oficial en sus explicaciones. Expresó su frustración ante lo que percibió como una acumulación de documentación teórica sin progreso práctico. El arquitecto también lamentó la inacción, habiendo albergado la esperanza de que un ministro oriundo de Tarija impulsara la obra con mayor celeridad y soluciones concretas.

La sesión contó con la participación de Efraín Rivera, secretario de Desarrollo Productivo de la Gobernación de Tarija, junto a otros miembros del comité impulsor: Jesús Gira, presidente del Comité Cívico de Tarija; Henry Medrano, presidente del Comité Cívico de Yacuiba; y delegados de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (SIB).

El comité busca que el Gobierno agilice la ejecución del proyecto hidroeléctrico El Carrizal, una obra estratégica que podría generar 366 megavatios de energía limpia. Esto no solo contribuiría a la sostenibilidad energética del país, sino que también reduciría la dependencia de la termoeléctrica, la cual consume gas tarijeño sin generar regalías para el departamento, un punto clave en las demandas regionales.

Por su parte, el ministro Ruiz procuró responder a las inquietudes presentando explicaciones de índole técnica y administrativa. Sin embargo, las declaraciones de López reflejaron el malestar generalizado en la región ante la prolongada ausencia de progresos en una infraestructura considerada fundamental para el desarrollo energético del sur boliviano