A escasos días de la fecha programada para el debate vicepresidencial, uno de los contendientes, Edman Lara, representante del Partido Demócrata Cristiano (PDC), ha manifestado públicamente nuevas condiciones para su participación. A pesar de haber confirmado previamente su asistencia, Lara comunicó su postura a través de plataformas digitales, sugiriendo una reestructuración en la dinámica del encuentro.
El candidato propuso la inclusión de una diversidad de moderadores, extendiendo la invitación más allá de los profesionales asociados a los grandes conglomerados mediáticos. Su argumento central radica en la necesidad de establecer un entorno imparcial que refleje una pluralidad de voces, lo cual, según su visión, fortalecería el carácter democrático e integrador del debate. Destacó que esta medida no solo beneficiaría a la ciudadanía, que merece un voto informado, sino que también honraría la comunicación plural y el periodismo en su conjunto.
El primer cara a cara entre Lara y Juan Pablo Velasco, de la Alianza Libre, está previsto para la noche del domingo 5 de octubre en la ciudad de Santa Cruz, bajo la organización del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Previamente, y tras una reunión de coordinación con los delegados de ambas agrupaciones políticas, un vocal del TSE había informado que los dos candidatos habían ratificado su participación de manera formal y escrita. Sin embargo, Lara optó por dirigirse directamente al organismo electoral con lo que describió como una solicitud crucial, no solo para su candidatura, sino para la salud del sistema democrático del país.
En su declaración, el candidato enfatizó la importancia de que los debates contribuyan a la formación de un electorado consciente. Para ello, consideró indispensable que la moderación sea llevada a cabo por una pluralidad de medios de comunicación que operen con independencia, garantizando un clima auténticamente neutral.
Aunque expresó respeto por los profesionales de los medios encargados de la transmisión, argumentó que la orientación editorial de ciertas plataformas es perceptible. Como ejemplo, señaló la falta de cobertura sobre ciertos eventos o declaraciones que, a su juicio, deberían haber recibido atención mediática similar a la dedicada a sus propias intervenciones. Afirmó que su campaña ha enfrentado un trato diferenciado en la difusión de información, percibiendo una restricción en la visibilidad de sus propuestas y, a la vez, una particular incisividad al abordar errores en sus declaraciones