La delegación del club de fútbol italiano Juventus realizó recientemente una visita a la Casa Blanca en Washington D.C. Este encuentro tuvo lugar poco antes de que el equipo disputara un partido amistoso en el Audi Field, donde lograron una contundente victoria por 5-0 frente al Al Ain.
Durante la reunión con el presidente estadounidense, la conversación abordó una variedad de temas que trascendieron el ámbito deportivo. Se trataron cuestiones de política internacional, incluyendo las tensiones con Irán, así como asuntos de inmigración y género.
Jugadores y directivos presentes en la sala mostraron signos de incomodidad en varios momentos del diálogo. El delantero Timothy Weah, quien participó en el encuentro, comentó posteriormente que la experiencia le resultó un poco extraña. Señaló que la visita fue inesperada para el equipo y que sintieron que no tenían otra opción que asistir. Weah expresó su preferencia por centrarse en el fútbol, especialmente cuando la discusión derivó hacia temas políticos.
Un punto particular de la interacción surgió cuando el presidente preguntó directamente a los representantes del club si consideraban que una mujer podría formar parte de su equipo. Tras un instante de silencio e indecisión entre los futbolistas, miembros de la directiva del Juventus intervinieron para destacar la calidad de su equipo femenino. El presidente reaccionó a esta respuesta, calificándola de diplomática, y añadió un comentario sobre la naturaleza de su contestación ante el mutismo de los jugadores.
La comitiva del Juventus que acudió a la Casa Blanca estaba compuesta por figuras clave del club, incluyendo al propietario, el consejero delegado, el director general, un directivo, el entrenador del equipo y varios jugadores. Entre los futbolistas presentes se encontraban los estadounidenses Weston McKennie y Timothy Weah, junto a compañeros de diversas nacionalidades europeas.
Como gesto de cortesía, el propietario del club obsequió al presidente una camiseta personalizada del Juventus, que llevaba su apellido y el número 47, simbolizando su posición como el cuadragésimo séptimo presidente de Estados Unidos. El propietario del club también recibió elogios por su trayectoria empresarial
