El gobernador Oscar Montes ha manifestado su profunda insatisfacción y recelo ante las recientes afirmaciones del senador electo Diego Ávila.
Según lo expresado por Montes, las acciones de Ávila constituyen una serie de intimidaciones continuas con el propósito de acallar su voz y restringir su capacidad para emitir juicios o fijar posturas sobre los comicios nacionales.
Montes estableció una analogía entre el proceder de Ávila y la figura de Lidia Patty, quien en su momento se destacaba por su enérgica defensa del Movimiento al Socialismo, subrayando que esa etapa política ya ha quedado atrás.
Adicionalmente, el mandatario enfatizó la necesidad de que el sistema judicial deje de ser utilizado como un instrumento político. Afirmó con contundencia que sus comentarios referentes al candidato presidencial Rodrigo Paz no incurrieron en ningún tipo de delito