En un encuentro europeo de alta tensión, el Chelsea logró rescatar un empate a dos goles, después de haber visto cómo el Qarabag revertía su ventaja inicial. El decisivo tanto del empate para el conjunto londinense fue obra del delantero argentino, quien, con su característica habilidad para encarar y buscar el remate, aseguró un punto que deja a los dirigidos por Enzo Maresca con siete unidades en la tabla, una cifra idéntica a la de su rival azerí.

El Qarabag, por su parte, reafirmó su notable desempeño en competiciones continentales. Tras victorias previas contra el Benfica, donde remontaron un 0-2, y el Copenhague, además de haber tomado la delantera ante el Athletic Club, el equipo demostró una vez más su capacidad de reacción. A pesar de encajar el primer gol a los quince minutos, anotado por Estevao, el joven talento de los ‘Blues’ que ha marcado en cuatro de sus últimos siete partidos, el cuadro azerí respondió con celeridad.

La remontada local se gestó en un lapso de apenas dos minutos. En el minuto 29, Leandro Andrade capitalizó un rebote en el poste tras una brillante jugada del colombiano Camilo Durán. Poco después, en el minuto 31, Marko Jankovic convirtió un penalti con maestría, engañando al guardameta Robert Sánchez. Ambos goles del Qarabag estuvieron precedidos por errores defensivos del central del Chelsea, Jorrell Hato, quien perdió el balón en la jugada del 1-1 y cometió la falta que derivó en el penalti del 1-2, marcando una jornada complicada para el neerlandés.

Al descanso, con el marcador 2-1 a favor del Qarabag y en un ambiente hostil, el técnico Enzo Maresca, quien ya había perdido a Romeo Lavia por una lesión muscular a los ocho minutos de juego, decidió realizar una triple sustitución. Enzo Fernández, el mencionado delantero argentino y Liam Delap ingresaron al campo con la misión de revitalizar al equipo.

La estrategia del técnico italiano rindió frutos casi de inmediato. El delantero argentino tardó menos de nueve minutos en encontrar la red, con un remate raso ajustado al palo que significó el empate. Posteriormente, Enzo Fernández estuvo cerca de completar la remontada con un potente disparo desde el área que fue bien repelido por el portero del Qarabag.

En los instantes finales del partido, ya en tiempo de descuento y con los suplentes del Qarabag listos para celebrar el empate, el atacante argentino ejecutó una espectacular chilena que pudo haber sido su segundo gol de la noche, pero el balón impactó en el cuerpo del guardameta, sellando el resultado final.

Este empate representa un sabor agridulce para el Chelsea, pero es un logro significativo para el Qarabag, que supera sus expectativas al sumar siete puntos después de cuatro jornadas. Los ‘Blues’ afrontarán su próximo compromiso, un duelo en Stamford Bridge contra el Barcelona, con la presión añadida de buscar una victoria