La continuidad del servicio de recolección de residuos en la ciudad de Tarija se encuentra bajo escrutinio debido a un desacuerdo surgido entre la Entidad Municipal de Aseo de Tarija (EMAT) y Servicios Eléctricos de Tarija (Setar) respecto a la recaudación de la tasa de aseo urbano. Ante esta situación, la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve) ha tomado la iniciativa de convocar a ambas instituciones a una mesa de diálogo. El propósito central de esta mediación es asegurar la operatividad ininterrumpida del servicio de gestión de desechos y evitar una potencial crisis sanitaria en la ciudad.

Existe una palpable inquietud en los barrios de la ciudad, ya que la interrupción en el cobro de la tasa por parte de Setar compromete directamente la viabilidad financiera de EMAT y, consecuentemente, la capacidad de mantener la recolección de residuos en todo el municipio.

El origen de esta controversia radica en la decisión de Setar de suspender la inclusión de la tasa de aseo en las facturas de energía eléctrica. Esta medida se tomó tras el vencimiento del convenio previamente establecido con EMAT y luego de que una resolución judicial anulara la obligación de continuar con dicha recaudación. Esta situación genera incertidumbre, dado que EMAT depende de estos ingresos para financiar sus operaciones de saneamiento en Tarija.

Una primera sesión de trabajo se llevó a cabo la semana anterior con el gerente de Setar, donde se estableció la necesidad de integrar también a EMAT para futuras mesas conjuntas. Se han remitido comunicaciones oficiales a ambas entidades con el fin de coordinar la fecha y hora de este encuentro. La expectativa es que este espacio de concertación permita revisar los marcos regulatorios existentes o diseñar mecanismos alternativos que garanticen la sostenibilidad del crucial servicio. Se subraya la importancia de que Setar y EMAT, como empresas fundamentales para la región, encuentren puntos de acuerdo y trabajen mancomunadamente en pro del bienestar de la ciudadanía