Representantes de la Asociación Nacional de Esposas y Madres de Policías llevaron a cabo una manifestación este jueves, motivadas por los recientes episodios de violencia, particularmente los ocurridos en Llallagua, que resultaron en la pérdida de vidas de efectivos policiales. Desde el departamento de Tarija, el colectivo expresó su firme oposición al desplazamiento de personal policial hacia zonas de conflicto.
Pilar Solano, quien preside a nivel nacional la asociación de esposas de policías, enfatizó que, mientras no se garanticen las condiciones de seguridad y el equipamiento adecuado, no permitirán el traslado de ningún agente a otras regiones del país afectadas por bloqueos y disturbios, argumentando que tales despliegues ponen en grave peligro la integridad de los uniformados.
Las manifestantes señalaron la preocupante falta de preparación y equipamiento con la que, según ellas, son enviados los policías a enfrentar situaciones de alto riesgo. Mencionaron específicamente la ausencia de chalecos antibalas y armamento suficiente, contrastando esta situación con la supuesta posesión de armas de fuego por parte de algunos grupos movilizados.
Una de las madres presentes, cuyos hijos sirven en la fuerza policial, manifestó con vehemencia que no aceptarán más muertes atribuidas a los conflictos políticos entre el gobierno y el expresidente, los cuales, a su juicio, están generando una escalada de actos violentos. Expresó el temor de que sus hijos sean enviados a morir de forma innecesaria en situaciones que, según su percepción, son responsabilidad de las partes en disputa y no se están abordando adecuadamente. Aseguró que impedirán estos traslados, independientemente de las circunstancias.
Asimismo, criticaron un decreto gubernamental reciente que restringe el uso de armas de fuego por parte de la Policía en el manejo de conflictos y disturbios. Consideran que esta medida limita la capacidad de los agentes para ejercer control, protegerse a sí mismos y resguardar a la ciudadanía.
Una portavoz del grupo destacó la creciente sensación de vulnerabilidad entre los efectivos policiales. Indicó que se están coordinando acciones similares en otros departamentos del país con el objetivo de presionar para que se proporcionen las garantías y el equipamiento necesario, incluyendo armamento, cuando la situación lo requiera.
En Tarija, estaba previsto para la tarde de este jueves el traslado de 108 efectivos policiales. Sin embargo, tras una reunión sostenida entre representantes de las esposas de policías y el comandante departamental, la orden de traslado fue suspendida. Este hecho se produce un día después de que, el pasado miércoles, ochenta agentes de la misma institución fueran trasladados desde Tarija para reforzar puntos de conflicto a nivel nacional, una acción que, según se informó previamente, se realizó a disposición del Comando General de la Policía
