La situación en Bermejo respecto a la gestión del servicio eléctrico ha generado un debate considerable entre los habitantes y las autoridades locales. Marco López, gerente general de Setar, ha manifestado que cualquier decisión sobre la posible transferencia de la gestión del servicio a otra entidad, como ENDE, recae en última instancia en la población y la Autoridad de Electricidad (AE).
Recientemente, la ciudad experimentó una interrupción significativa en el suministro eléctrico debido al colapso de un transformador, que dejó a los ciudadanos sin energía durante una semana. Aunque el problema se resolvió el sábado pasado, las demandas para una intervención en Setar-Bermejo han aumentado, impulsadas por la necesidad de mejorar el servicio.
López enfatizó que, aunque la decisión de cambiar de proveedor es un derecho de los ciudadanos, la AE tiene la responsabilidad de regular y evaluar tales solicitudes. Afirmó que tener una empresa departamental suele ser más beneficioso para los usuarios, ya que permite tarifas planas y costos operativos más bajos, lo que podría ser más ventajoso en comparación con otras opciones.
El gerente también destacó que cualquier análisis sobre la intervención debe considerar el patrimonio de Setar en Bermejo, un proceso que está regulado por la Ley de Electricidad. Esto implica la recopilación de información y la evaluación de las condiciones actuales del servicio.
En cuanto a la posibilidad de una intervención, López señaló que la AE es la autoridad que decidirá si procede y qué operador asumirá la gestión. En el contexto nacional, ENDE se posiciona como el operador preferente, aunque Setar no se opone a la evaluación de esta opción.
López también se refirió a la responsabilidad de ENDE en relación al transformador que sufrió daños, indicando que esta empresa debe proporcionar un informe sobre las causas del incidente. Aclaró que, aunque el transformador es propiedad de Setar, se había contratado a ENDE para su instalación y supervisión técnica, debido a su capacidad en el área.
El costo del traslado e instalación del transformador anterior fue de 1,9 millones de bolivianos, y se realizaron contratos adicionales para su mantenimiento. La situación actual pone de manifiesto la necesidad de una evaluación exhaustiva y una comunicación clara entre las entidades involucradas y la comunidad para garantizar un servicio eléctrico eficiente y confiable en Bermejo