La situación de la deuda externa de Bolivia ha mostrado una notable evolución, alcanzando un 26,8% del Producto Interno Bruto (PIB) hasta septiembre de este año. Este porcentaje se mantiene por debajo del límite del 50% establecido por la Comunidad Andina, lo que indica un manejo prudente de las obligaciones financieras del país. Al cierre de septiembre de 2024, la deuda externa se sitúa en 13.333 millones de dólares.
En este contexto, el Gobierno ha desmentido las afirmaciones del presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico Rodríguez, quien había señalado que la deuda total, tanto externa como interna, asciende a cerca de 30.000 millones de dólares. Rodríguez también criticó la falta de avances en la agenda patriótica de 2025 bajo la administración de Luis Arce.
El viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Zenón Mamani, defendió la gestión del actual gobierno, recordando que cuando Arce asumió la presidencia en noviembre de 2020, la deuda externa representaba el 33% del PIB. Según Mamani, la administración actual ha logrado reducir este porcentaje, lo que refleja un manejo responsable de las finanzas públicas.
Históricamente, la deuda externa de Bolivia ha experimentado fluctuaciones significativas. En 1986, alcanzó un alarmante 99% del PIB, y durante el gobierno de Jaime Paz Zamora, entre 1990 y 1993, se mantuvo en torno al 70%. Posteriormente, durante las gestiones de Gonzalo Sánchez de Lozada y Jorge Quiroga, la deuda osciló entre el 55% y el 75% del PIB.
Mamani atribuyó la disminución de la deuda externa a un aumento en la producción, resultado de la inversión pública realizada en los últimos cuatro años. A finales de 2023, el PIB nominal de Bolivia se estimó en 45.464 millones de dólares.
El viceministro enfatizó que la deuda externa del país está por debajo de los límites establecidos por la Comunidad Andina y otros organismos internacionales. Resaltó que el enfoque del endeudamiento se orienta hacia la inversión productiva, solicitando la aprobación de más de 2.200 millones de dólares en créditos destinados a infraestructura y desarrollo productivo por parte de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
Además, aseguró que Bolivia cumple con sus obligaciones de pago, habiendo desembolsado 1.051 millones de dólares desde enero hasta el 18 de septiembre, lo que representa el 75% del servicio de la deuda externa previsto para 2024
