El flujo comercial transfronterizo en Bermejo ha experimentado una reducción superior al cincuenta por ciento, una situación que se atribuye principalmente a la escasez de divisas y a la dinámica del tipo de cambio entre Bolivia y Argentina. A pesar de la reciente depreciación de la moneda boliviana, la coyuntura económica general persiste como un desafío. No obstante, la localidad de Bermejo aún conserva cierto atractivo para los ciudadanos argentinos que cruzan la frontera.
En relación con la propuesta presidencial para suprimir la aduana en la zona limítrofe, existe una considerable expectativa entre la población. Sin embargo, se ha señalado que una aplicación indiscriminada a todos los productos resultaría inviable, subrayando la necesidad de un estudio exhaustivo y pragmático de sus implicaciones antes de cualquier implementación

