El Gobierno boliviano liderado por Luis Arce impulsa la instalación de redes de gas domiciliario en todo el país, mejorando la calidad de vida de la población.
El Gobierno de Bolivia ha logrado significativos avances en la expansión del servicio de gas domiciliario, beneficiando a miles de familias en diferentes regiones del país. Con una inversión millonaria, se han instalado miles de conexiones, reduciendo los gastos mensuales de los hogares y promoviendo un desarrollo sostenible.
El Gobierno boliviano, encabezado por el presidente Luis Arce, ha anunciado importantes avances en la expansión del servicio de gas domiciliario en el Gran Chaco de Tarija. Según las declaraciones del mandatario, desde noviembre de 2020 hasta la fecha actual, un total de 7.488 hogares en la región han logrado acceder a este servicio básico, lo que representa un significativo beneficio para las familias tarijeñas.
Arce destacó la importancia de estas acciones concretas que impactan directamente en la calidad de vida de la población, asegurando que su gestión se caracteriza por ser un Gobierno de hechos más que de palabras. En un mensaje difundido a través de sus redes sociales, el presidente subrayó que el objetivo es continuar trabajando incansablemente para mejorar las condiciones de vida de los bolivianos, especialmente aquellos que han dependido históricamente de la utilización de garrafas como fuente de energía.
En el marco de los planes para el año en curso, se tiene previsto la instalación de otras 2.000 conexiones de gas domiciliario en el Gran Chaco, como parte de las iniciativas destinadas a fortalecer el bienestar de la población. Este proyecto se enmarca dentro de las celebraciones por el Bicentenario de Bolivia, que se conmemorará en 2025, y que busca llevar beneficios tangibles a la sociedad boliviana en su conjunto.
A nivel nacional, la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) ha destinado una inversión considerable de $us 63,35 millones para la instalación de 60.400 conexiones de gas domiciliario en los nueve departamentos del país. Este ambicioso plan incluye la construcción de 20.000 instalaciones internas en La Paz, 13.980 en Santa Cruz, 11.400 en Cochabamba, 4.020 en Chuquisaca, 4.000 en Potosí, 4.000 en Oruro, 2.000 en Tarija, 740 en Beni y 260 conexiones internas en Pando.
Es importante destacar que, del total de instalaciones previstas a nivel nacional, alrededor de 57.224 conexiones se realizarán mediante el sistema convencional, mientras que 3.176 serán a través del Sistema de Transporte Virtual de Gas Natural Licuado (GNL). Estas acciones representan un paso significativo en el proceso de modernización y ampliación de la red de distribución de gas en Bolivia, lo cual impactará positivamente en la economía de los hogares beneficiados, que verán reducidos sus gastos mensuales al dejar de depender de las garrafas de Gas Licuado de Petróleo.
En resumen, el proyecto de instalación de redes de gas domiciliario en Bolivia se consolida como una de las iniciativas sociales más relevantes del Gobierno, con el potencial de generar un impacto significativo en la calidad de vida de miles de familias bolivianas. La apuesta por el acceso a este servicio básico no solo representa un ahorro económico para los beneficiarios, sino que también contribuye a mejorar sus condiciones de vida y a promover un desarrollo sostenible en todo el país.
La instalación de gas domiciliario en Bolivia es una iniciativa que busca mejorar las condiciones de vida de la población, generando un impacto positivo en la economía de los hogares y promoviendo un desarrollo sostenible a nivel nacional.
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