En un acto celebrado en la emblemática Plaza Principal Luis de Fuentes y Vargas, la administración municipal de Tarija, encabezada por el alcalde Johnny Torres Terzo, formalizó un acuerdo significativo con el Ministerio de Medio Ambiente y Agua, representado por su titular, Álvaro Ruiz. Este convenio está diseñado para impulsar proyectos cruciales que beneficiarán directamente a la población tarijeña.
Entre las iniciativas contempladas, se destaca la construcción de la Presa de Calderas, una obra de infraestructura hídrica que contará con una contraparte financiera por parte del gobierno municipal. Asimismo, el acuerdo abarca la implementación de un sistema de alcantarillado para el Distrito 6, que incluye zonas como Aranjuez, Parrales y Monte Cristo. La viabilidad de estos proyectos esenciales, relacionados con el suministro de agua potable y el saneamiento básico, se asegura mediante la contribución municipal, sumada a la colaboración de la Gobernación y el Gobierno central. Un tercer componente fundamental del convenio es la realización de un estudio técnico para el cierre definitivo del botadero municipal, abordando una problemática ambiental de larga data en la ciudad.
El evento de la firma de este convenio contó con la presencia de destacadas autoridades regionales y municipales, incluyendo al Gobernador de Tarija, Oscar Montes Barzón, y a los alcaldes de San Lorenzo, Asunción Ramos; de El Puente, Sara Armella; y de Bermejo, Ireneo Flores.
Desde la perspectiva del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, se subrayó el impacto de estas inversiones en la región. En el municipio de Tarija, se proyecta la ejecución del canal de riego en Calderas, con una inversión estimada de 35 millones de bolivianos. Adicionalmente, se contempla la presa de Villa Esperanza en San Lorenzo, con un presupuesto que supera los 60 millones de bolivianos. Otros sistemas de riego se desarrollarán en El Puente, con una inversión de 4.5 millones de bolivianos, y en Bermejo, con 30 millones de bolivianos. La coordinación entre los diferentes niveles de gobierno ha permitido concretar una inversión total que supera los 100 millones de bolivianos, lo que se traducirá en la habilitación de más de 1.800 hectáreas bajo riego, potenciando la productividad agrícola y mejorando la calidad de vida en la región