La trágica muerte de una adolescente de 15 años, cuyo cuerpo fue descubierto en un terreno baldío en El Alto, ha revelado detalles iniciales que apuntan a circunstancias complejas en torno a su deceso. Las primeras investigaciones y el informe forense sugieren que la joven, Maciel B. Q., llegó al lugar por sus propios medios y falleció a causa de broncoaspiración, sin que se hayan encontrado signos visibles de violencia en su cuerpo.

Especialistas de la unidad de Delitos Contra la Vida han indicado que las pesquisas preliminares sugieren que la menor había estado consumiendo bebidas alcohólicas. Se presume que compartía con otros jóvenes de su edad en una vivienda abandonada, conocida por ser un punto de reunión para adolescentes. La presencia de tierra y pasto en sus calcetines respalda la hipótesis de que caminó hasta el sitio donde fue hallada.

Maciel fue reportada como desaparecida el sábado 18 de octubre. Según el relato de sus familiares, salió de casa tras dejar a sus dos hermanos menores, mencionando que iría a jugar un rato, pero nunca regresó. Su cuerpo fue encontrado cinco días después, el jueves 23, por vecinos que alertaron a las autoridades sobre el hallazgo en un lote desocupado.

El análisis forense descartó cualquier indicio de agresión física, confirmando que la causa de la muerte fue broncoaspiración, es decir, la asfixia provocada por el ingreso de vómito o líquidos a las vías respiratorias. A pesar de estos hallazgos, las autoridades mantienen abiertas diversas líneas de investigación para esclarecer completamente las circunstancias que rodearon el suceso.

En el marco de la investigación, el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) ha confirmado que se procederá al análisis del teléfono celular de la víctima. El objetivo es identificar las comunicaciones previas a su fallecimiento y determinar quiénes la acompañaron durante las horas cruciales antes del incidente. La atención se centra en las personas con las que compartió en ese período.

La noticia del descubrimiento ha sumido a la familia de Maciel en un profundo dolor e indignación. Sus parientes, visiblemente afectados, rememoraron los últimos momentos antes de su desaparición y han exigido una investigación exhaustiva. Narraron cómo la joven se despidió para una breve salida, sin imaginar que no volvería. Durante los días de su ausencia, la familia recorrió incansablemente varias zonas y acudió a la policía. Testimonios recabados por los familiares sugieren que la menor pudo haber estado en una casa donde otros adolescentes solían reunirse para consumir alcohol.

La Fiscalía no descarta la posibilidad de convocar a compañeros de colegio de la víctima para que presten declaración, esperando que sus testimonios aporten información crucial para reconstruir sus últimas horas de vida. El caso continúa bajo investigación activa, y las autoridades no descartan la posible participación de terceros en los hechos. En medio de su angustia, el padre de Maciel ha expresado su firme deseo de conocer la verdad, rechazando la idea de que su hija haya muerto sola y enfatizando su juventud e inocencia