El 3 de octubre de 2024, en sus redes sociales, el presidente Luis Arce Catacora informaba sobre su presencia en el aniversario número 42 de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), en Santa Cruz.
“Aprovechamos este importante momento para hacer la entrega de 101 títulos agrarios, en beneficio de más de 61.900 familias de 61.900 familias de 16 pueblos de Beni, Chuquisaca, La Paz, Tarija y Santa Cruz, con los que saneamos un total de 318.882 hectáreas”, menciona la publicación.
En las fotos, además de representantes de naciones indígenas de Bolivia, aparecieron los de Estados Unidos de Kailasa, obsequiando un libro al primer mandatario. Medios internacionales aseguran que es un Estado ficticio, que en el país ofreció pagos a los dirigentes por el arrendamiento de tierras por mil años, renovables de forma automática.
EL DEBER consultó sobre la presencia de estas personas a Justo Molina, presidente de la Cidob afín al Gobierno. Aseguró que no fueron invitadas al acto, y que se subieron a la testera a dar un presente a Arce, aprovechando la entrega de otros regalos.
Asimismo, dijo que pedirá la expulsión de los representantes de Kailasa del país. “Me buscaron hace un año aproximadamente, pero no los atendí porque había leído las noticias sobre ellos, ofrecían ayudar en salud; también indicaron que tenían copia de los documentos de algunos territorios”, informó a EL DEBER.
Además, Molina aseguró que aparte de las tres naciones amazónicas ese ejja, cayubaba y baure, que ya habían aceptado los contratos de arrendamiento por mil años, los representantes de Kailasa estaban en negociaciones con Modesta Santistevan, de los guaraníes de Cordillera. “Se hace pasar por dirigente”, aludió.
Otra persona que aparece en fotografías con la gente de Kailasa es el diputado Herbert Taboada, específicamente en la sede administrativa en Los Ángeles (EE.UU.) La publicación fue eliminada de su Facebook ayer, y sobre esto, aseguró que no tiene nada que ocultar, que su visita a California fue para aprovechar su visa, y que además estuvo en otros estados. “Tenía que viajar y coincidió con esa actividad”, aseveró.
Taboada además aparece en la página de Kailasa junto a otros invitados bolivianos VIP a la fiesta Khumbamela, como la diputada Krupskaya Oña, Ninoska Jhovanka Toro Espada (despachante de Aduana Ala Falabella SRL), y los dirigentes indígenas Yoshimi Rojas Rapu (cayubaba), Rapu Salvatierra (cayubaba), María Eugenia Mendoza (cayubaba), Fader Velasco Asiama (cayubaba), y Roddy Alberto Chávez (cayubaba). “Es una celebración hindú, fue virtual, y estábamos invitados”, explicó Taboada.
DesistieronRoddy Alberto Chávez Atoyay, dirigente cayubaba que inicialmente aceptó el trato, se comunicó con EL DEBER para aclarar que había desistido, por considerarlo contrario a los mandatos del estatuto del pueblo indígena.
Chávez Atoyay admitió que hubo conversaciones y la firma de un convenio con el Estado de Kailasa para destinar alrededor de 60 mil hectáreas de territorio a la conservación de bosques, a cambio del pago de 50 mil dólares al año y entrega de vituallas para las comunidades rurales. Indicó que el contacto fue con un abogado ecuatoriano (Miguel Antonio Chumapi), representante de Kailasa, desde agosto del año pasado.
“Estoy tranquilo, en cierta forma, porque no se ha cometido irregularidad alguna, la intención era hacer algo en beneficio de nuestra población. El documento y lo que abarcaba su contenido era otra cosa, no como decían al inicio”, lamentó, y agregó que en ese territorio tienen muchas necesidades y problemas de plagas, inundaciones y sequía, razones para aceptar el contrato.
Según consta en documentos, las naciones cayubaba, esse ejja y baure ya fueron contactadas por este grupo religioso de la India y recibieron los convenios y los firmaron; aseguran que después desistieron. También buscaron a pueblos andinos
FUENTE: www.eldeber.com.bo