El número de militares colombianos fallecidos tras el ataque a una base en la región del Cesar aumentó a seis, mientras que 31 soldados resultaron heridos, según informó el Ejército. En el atentado, atribuido al Frente Camilo Torres del Ejército de Liberación Nacional (ELN), se emplearon drones equipados con explosivos improvisados.

Durante el ataque contra la Base Militar 27, correspondiente al Batallón de Infantería No. 14 Antonio Ricaurte, los soldados se encontraban descansando tras una jornada de entrenamiento cuando fueron sorprendidos por granadas lanzadas desde drones y otros dispositivos explosivos. Entre las víctimas fatales se encuentran Jaime Alejandro Cárdenas Ramírez, Mateo Pino Pulgarín, Juan David Pérez Vides, Kevin Andrés Méndez Torres, Jhon Fredy Moreno Sierra y Brandon Daniel Valderrama Martínez.

El Ejército detalló que, de los 31 heridos, cinco requieren atención médica especializada, mientras que los demás presentan lesiones leves y están en proceso de recuperación. Inicialmente, las autoridades habían reportado cuatro muertos y siete heridos, pero la cifra se actualizó conforme avanzaron las investigaciones.

El comandante del Ejército, general Luis Emilio Cardozo, señaló que desde abril de 2024, cuando se registró el primer ataque con drones en el departamento del Cauca, se han contabilizado 395 atentados con estos dispositivos en el conflicto armado colombiano. Este tipo de armamento representa una amenaza multidominio que se ha consolidado en el escenario bélico nacional.

La base atacada está situada en el caserío El Juncal, en la jurisdicción de Aguachica, una zona donde el ELN mantiene una fuerte presencia y que recientemente fue escenario de aproximadamente cien acciones armadas durante un paro impuesto por esta guerrilla.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez Suárez, condenó enérgicamente el ataque y destacó que, aunque las Fuerzas Militares han logrado impedir alrededor del 95 % de los ataques con drones, la amenaza continúa creciendo rápidamente, poniendo en riesgo la seguridad nacional. Además, enfatizó la necesidad de desmantelar completamente las estructuras terroristas del ELN para proteger a la población civil.

Cabe mencionar que, días antes, disidencias de las FARC llevaron a cabo una toma prolongada en la localidad de Buenos Aires, en Cauca, donde resultaron heridos ocho policías y se registraron daños significativos en varias edificaciones. Estos hechos evidencian la persistencia de la violencia armada en distintas regiones del país

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