La Selección Nacional de fútbol llevó a cabo una sesión de entrenamiento en el estadio Real Santa Cruz, a pesar de que el terreno presentaba condiciones poco favorables tras la intensa lluvia que afectó la región y luego de haber sido sede de la semifinal de ida entre Blooming y Bolívar. El campo estaba anegado, lo que complicó la preparación del equipo de cara a su próximo compromiso internacional.

El entrenador Óscar Villegas reconoció las dificultades que enfrentaron debido al mal estado del campo y las condiciones climáticas adversas, pero destacó la capacidad del equipo para adaptarse a estas circunstancias. Además, el cuerpo técnico tuvo que lidiar con la ausencia de varios jugadores clave de Bolívar y Blooming, quienes debían cumplir con sus compromisos en la fase semifinal de la Copa de la División Profesional.

El plantel continuará con sus entrenamientos este jueves en la misma ciudad, antes de emprender el viaje hacia Perú el viernes. La delegación, compuesta por alrededor de veinte futbolistas, hará una escala en Lima antes de dirigirse a Chincha, donde el domingo a las 16:30 horas se enfrentará a la selección peruana en un encuentro que marcará el cierre de la temporada para el equipo boliviano.

Este periodo de preparación se realiza en el estadio de Real Santa Cruz, que ha ganado protagonismo en la región debido al cierre temporal del estadio Ramón Aguilera Costas, previsto para reabrirse el próximo mes. A pesar de los inconvenientes, el equipo nacional mantiene su enfoque en la próxima prueba internacional y busca cerrar la temporada con un buen desempeño

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