Antes del encuentro disputado en Tokio entre Japón y Bolivia, que culminó con un triunfo local por 3-0, se llevó a cabo un emotivo minuto de silencio en memoria de Xabier Azkargorta, una figura emblemática en la historia del fútbol boliviano. Este acto de respeto conmovió a los asistentes y marcó el inicio del evento deportivo.
En el centro del campo, los futbolistas de ambos equipos se congregaron para rendir homenaje, mientras que en las pantallas del estadio se exhibió una imagen del entrenador vasco, conocido popularmente como el “Bigotón”. La atmósfera se mantuvo en absoluto silencio y respeto durante este momento.
Al finalizar el minuto de silencio, el Estadio Nacional de Tokio estalló en aplausos y ovaciones dedicadas al extécnico, quien también dejó una huella significativa en Japón tras su paso por el Yokohama Marinos entre 1997 y 1998, donde logró coronarse campeón.
Los aplausos provinieron no solo del público local, sino también de los seguidores bolivianos presentes, quienes manifestaron su gratitud y admiración hacia el histórico entrenador que llevó a Bolivia a participar en la Copa Mundial de 1994.
En la conferencia de prensa previa al partido, el director técnico de Bolivia, Óscar Villegas, también rindió homenaje a Azkargorta, resaltando la trascendencia de su legado y su influencia en varias generaciones de futbolistas. Villegas destacó que el entrenador español revolucionó el fútbol boliviano, especialmente en cuanto a la mentalidad, inspirando a los jugadores a creer en su capacidad para competir en el ámbito internacional


