Las autoridades bolivianas han confirmado el regreso de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) al país para reforzar la lucha contra el narcotráfico. Así lo anunciaron el ministro de Gobierno, Marco Antonio Oviedo, y el viceministro de Defensa Social, Ernesto Justiniano, quienes destacaron la importancia de la cooperación internacional en esta tarea.
Oviedo señaló que Bolivia contará con el apoyo de diversas agencias y países en la lucha contra delitos transnacionales, mencionando específicamente la participación de la DEA, unidades policiales de la Unión Europea y convenios con naciones vecinas. Este anuncio se realizó durante la ceremonia de posesión de tres nuevos viceministros: Jorge Franz García en Régimen Interior, Ernesto Justiniano en Defensa Social y Sustancias Controladas, y Rolando Montaño en Seguridad Ciudadana.
Por su parte, Justiniano enfatizó la exigencia que implica enfrentar el narcotráfico y la necesidad de fortalecer las instituciones nacionales para proteger a la sociedad. Afirmó que su gestión trabajará en coordinación con agencias internacionales, resaltando que en la administración anterior estas colaboraciones no tuvieron una presencia significativa. Además, adelantó que la DEA podría iniciar actividades en coordinación con países limítrofes en los próximos días, buscando una acción conjunta en la región.
Cabe recordar que la DEA fue expulsada de Bolivia en 2009, tras un proceso iniciado en 2008 que incluyó la salida del embajador estadounidense Philip Goldberg, bajo acusaciones de injerencia en asuntos internos. En este contexto, Justiniano indicó que ha solicitado a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) datos estadísticos para diseñar planes y objetivos claros en la lucha antidrogas. Asimismo, reconoció la importancia de incorporar información sobre la capacidad de producción de drogas en Bolivia, un aspecto que hasta ahora no ha sido cuantificado con precisión.
Esta reanudación de la cooperación con la DEA y otras agencias internacionales representa un paso significativo en la estrategia boliviana para combatir el narcotráfico, buscando fortalecer las instituciones y coordinar esfuerzos regionales para enfrentar este desafío

