En una contundente demostración de fútbol, el Club Aurora propinó una goleada de 4-0 a Guabirá la noche del martes en el estadio Félix Capriles, poniendo fin a una impresionante racha de nueve partidos invictos de los visitantes. Este resultado acerca significativamente a Aurora a la clasificación para los cuartos de final del torneo.

La superioridad local se manifestó tempranamente. Apenas transcurridos quince minutos de juego, Rodrigo Ramallo inauguró el marcador con un potente disparo de pierna derecha. Poco después, la dinámica del encuentro cambió drásticamente cuando David Robles, defensor de Guabirá, recibió una tarjeta roja, dejando a su equipo con diez hombres y una notable vulnerabilidad en la zaga. Aurora no tardó en capitalizar esta ventaja numérica. Adriel Fernández se erigió como figura con un doblete en esta primera mitad: primero, transformando un penal a los veinticuatro minutos, y luego, a la media hora de partido, culminando un rápido contragolpe con una precisa definición de zurda tras una hábil maniobra dentro del área.

El dominio de Aurora se extendió al segundo tiempo. A los sesenta y nueve minutos, Jair Torrico selló la goleada con otro lanzamiento penal. Su ejecución, un potente remate dirigido al centro de la portería, dejó sin opciones al guardameta Manuel Ferrer, quien se había lanzado hacia un costado.

A pesar de la contundente derrota, que sin duda representa un golpe anímico para los Diablos Rojos y pone fin a su notable secuencia de partidos sin perder, Guabirá mantiene su posición de liderazgo en el Grupo D de la Copa. Con veinticuatro puntos, conserva una ventaja de cinco unidades sobre su inmediato perseguidor, Oriente Petrolero, lo que, por ahora, asegura su permanencia en la cima de la tabla