El cuerpo de Néstor Cruz Zamorano, un transportista de 60 años cuya desaparición había sido denunciada a finales de septiembre, fue descubierto sin vida bajo un puente en la región de Tiraque. La necropsia forense determinó que el deceso se produjo por asfixia mecánica, específicamente estrangulamiento. Las fuerzas del orden continúan la búsqueda de su vehículo, que permanece sin ser localizado.
Cruz Zamorano fue visto por última vez al salir de su residencia en Monte Cato. Se dirigía al municipio de Vinto para iniciar su jornada laboral, conduciendo su minibús afiliado al Sindicato Mixto 208. Al no retornar a su hogar, sus familiares presentaron la denuncia por ausencia. Días después, equipos de búsqueda localizaron sus restos mortales. El cuerpo, encontrado en estado avanzado de descomposición y en posición decúbito dorsal, presentaba signos evidentes de violencia.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) ha iniciado una investigación bajo la principal hipótesis de robo agravado seguido de muerte, aunque no se descartan otras posibilidades. El minibús que operaba la víctima aún no ha sido recuperado y se presume que pudo haber sido trasladado hacia la zona del trópico cochabambino, lo que ha motivado la intensificación de operativos en esa área.
Las autoridades han manifestado su firme compromiso de esclarecer el crimen y aprehender a los responsables. Este trágico suceso ha generado consternación entre sus colegas transportistas y la comunidad local. El hijo de la víctima fue quien realizó la identificación formal en el lugar del hallazgo.
La familia de Néstor Cruz ha solicitado vehementemente que se haga justicia y que los autores del hecho sean prontamente llevados ante la ley. La División de Homicidios de la Felcc continúa recabando testimonios y elementos probatorios con el objetivo de avanzar en la resolución del caso en los próximos días