El próximo domingo 19 de octubre, la ciudadanía boliviana se prepara para la segunda vuelta electoral, un evento crucial para definir la presidencia y vicepresidencia del país. En este contexto, las autoridades electorales han manifestado una creciente inquietud respecto al nivel de preparación de los jurados electorales, elementos fundamentales para la transparencia y eficiencia del proceso.
Un alto funcionario del Tribunal Supremo Electoral ha hecho un llamado enfático a los jurados sorteados, instándolos encarecidamente a participar en los cursos de capacitación. Se ha subrayado que esta formación es de carácter obligatorio y esencial para el correcto desempeño de sus funciones. Los centros habilitados por los tribunales electorales departamentales permanecerán abiertos para la capacitación hasta el sábado, ofreciendo una última oportunidad para que los jurados cumplan con este requisito.
La importancia de esta preparación radica en que permitirá a los jurados ejercer sus responsabilidades a cabalidad, contribuyendo a que la jornada de votación se desarrolle de manera más fluida y organizada. Además, se anticipa que el proceso de escrutinio será considerablemente más sencillo y rápido que en la elección anterior, dado que los votantes solo tendrán dos opciones para elegir. Esta simplicidad en el conteo podría traducirse en una culminación más temprana de la jornada electoral.
Sin embargo, la preocupación no es nueva. Ya la semana pasada se había reportado una baja asistencia de los jurados electorales a los cursos de formación. Esta situación ha sido corroborada por el vicepresidente del Tribunal Electoral Departamental de Santa Cruz, quien destacó un ausentismo significativo, oscilando entre el 50% y el 70% en circunscripciones específicas como la 44 y la 45.
Los comicios del domingo determinarán quién ocupará los cargos de presidente y vicepresidente entre los dos binomios que obtuvieron la mayor preferencia en las elecciones generales del pasado 17 de agosto. Los candidatos en contienda son Rodrigo Paz y Edman Lara, representantes del Partido Demócrata Cristiano, y Jorge Tuto Quiroga y Juan Pablo Velasco, de la Alianza Libre