Con la mira puesta en el próximo desafío contra Bolivia por las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de 2026, el seleccionador de Brasil, Carlo Ancelotti, implementó una serie de variaciones tácticas en la alineación titular durante la práctica del domingo. A pesar de los ajustes en todas las líneas respecto al encuentro anterior frente a Chile, el esquema ofensivo se mantuvo con cuatro atacantes.
El conjunto nacional continuó su preparación en la Granja Comary, el reconocido centro de alto rendimiento de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), situado en Teresópolis, estado de Río de Janeiro, donde los jugadores han permanecido concentrados durante la última semana. La estrategia del técnico italiano parece orientada a conceder minutos a futbolistas que han tenido menor participación, especialmente ante un rival como Bolivia, que se juega sus últimas opciones de acceder a la repesca mundialista.
Durante la sesión dominical, que solo fue parcialmente accesible para los medios de comunicación, se observaron pruebas en la retaguardia con Fabrício Bruno y Alex en la zaga central, flanqueados por Caio Henrique y Vitinho en los laterales. En el mediocampo, se perfila la posible inclusión de Andrey Santos junto a Lucas Paquetá, cubriendo la ausencia de Casemiro, quien se encuentra suspendido por acumulación de tarjetas, y potencialmente relegando a Bruno Guimarães. En la vanguardia, Ancelotti experimentó con Richarlison como referente en la posición de centrodelantero, secundado por un trío ofensivo compuesto por Estêvão, Gabriel Martinelli y Raphinha. Cabe destacar que estos tres últimos fueron titulares en la convincente victoria por 3-0 sobre Chile el pasado jueves en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
La selección brasileña, que ya ha asegurado su clasificación para la cita mundialista, se medirá el martes a su par boliviano en la desafiante altitud de El Alto, a 4.100 metros sobre el nivel del mar, en lo que será el cierre de las eliminatorias sudamericanas. Actualmente, la pentacampeona del mundo ocupa la segunda posición en la tabla, acumulando 28 puntos, diez menos que Argentina, líder indiscutible del certamen. Junto a Argentina y Brasil, otras naciones como Uruguay, Ecuador, Colombia y Paraguay también han sellado matemáticamente su pase al Mundial de 2026, que se organizará conjuntamente en México, Canadá y Estados Unidos. La única incógnita que resta por despejar en estas eliminatorias es el equipo que ocupará la plaza de repesca, un puesto que en este momento ostenta Venezuela, con Bolivia pisándole los talones a tan solo un punto de distancia