Tras su regreso de Barranquilla, donde sufrió una contundente derrota por 0-3, la selección boliviana de fútbol inició su primera sesión de entrenamiento en campo este sábado por la tarde. Este resultado mantiene al equipo en la octava posición de la tabla, con 17 puntos.
A pesar del desánimo que pudo generar el reciente tropiezo frente a Colombia y ante el inminente desafío contra Brasil, el optimismo persiste en el seno del plantel. El mediocampista Roberto Fernández ha manifestado que las opciones de alcanzar la repesca permanecen vigentes y que el destino final del combinado nacional se definirá en el último encuentro. Ha subrayado la importancia de mantener una actitud positiva y la confianza en el rendimiento colectivo demostrado por los futbolistas. Fernández, de hecho, está previsto que sea parte del once inicial frente al combinado brasileño.
Actualmente, el equipo se encuentra a un punto de Venezuela, que ocupa la posición inmediatamente superior y disputará su partido de local contra Colombia en horario simultáneo al encuentro de Bolivia. La meta es clara: conseguir una victoria que permita mantener viva la ilusión hasta el final de la competición, si bien se reconoce que su avance también dependerá de otros resultados. Fernández, quien volverá a ocupar el puesto de lateral por la izquierda, buscará asociarse eficazmente con Carlos Melgar en el campo.
Un aspecto favorable es que la plantilla llega a esta última jornada sin bajas, ya sea por lesión o por acumulación de amonestaciones. Las preparaciones continuarán este domingo con una nueva sesión en el estadio Hernando Siles, donde se definirá la alineación titular para el crucial enfrentamiento