El Club ABB, que disputa su primera temporada en la División Profesional, atraviesa una profunda y compleja coyuntura. La plantilla del primer equipo ha hecho pública su grave preocupación por la situación económica de la institución, señalando que la directiva mantiene salarios pendientes de pago, con atrasos que oscilan entre tres y hasta seis meses.

Los futbolistas han indicado que esta prolongada falta de remuneración está impactando negativamente no solo su bienestar individual y familiar, sino también su estado anímico y, consecuentemente, el desempeño colectivo en el campo de juego. A pesar de reconocer las dificultades económicas que enfrenta la entidad, los deportistas han enfatizado la urgencia de obtener una respuesta concreta. Han solicitado, con un tono respetuoso pero firme, una pronta solución para la regularización de sus haberes.

La plantilla ha expresado su total disposición a entablar un diálogo constructivo con la dirigencia, buscando alternativas conjuntas que beneficien tanto a la institución como al grupo humano que la conforma. Subrayan que su motivación principal reside en el profundo afecto y compromiso que sienten por el Club ABB.

A este complejo panorama se suma la reciente desvinculación del director técnico paraguayo Pablo Godoy, quien dejó su cargo en medio de este escenario adverso. La directiva del club ha emitido un comunicado agradeciendo a Godoy por su dedicación, profesionalismo y compromiso durante el tiempo que estuvo al frente del equipo