Celestino Barro, presidente de la Federación Departamental de Juntas Vecinales de Tarija, ha manifestado su insatisfacción con la reciente determinación de los asambleístas departamentales de aplicar una reducción de 1500 bolivianos a sus salarios. Según Barro, la solicitud inicial planteaba una disminución del 50% de sus ingresos, con el propósito de fomentar la austeridad y reasignar esos recursos para fortalecer las condiciones en diversas áreas que benefician a la comunidad.
Frente a esta situación, la entidad vecinal tiene previsto enviar una nueva comunicación formal al presidente de la Asamblea, reiterando la demanda de una reducción salarial más significativa. Barro enfatizó que los legisladores podrían mantener un nivel de vida adecuado con un ingreso de 7000 bolivianos, sugiriendo una desconexión entre la realidad económica de los representantes y la de la población en general

